El pensamiento positivo

La actitud y pensamiento positivo ante los distintos sucesos de la vida generan a su vez más sucesos y sentimientos positivos. Los psicólogos recomendamos que este tipo de actitudes sean practicadas cada día como si de un entrenamiento físico se tratara, de tal forma que consigamos que surjan de forma espontánea y nos reporten una actitud positiva ante la vida.
Cada día podemos realizar una serie de actividades que favorecen el pensamiento positivo:
- Sonreír ante el espejo cada vez que nos reflejamos en el.
- Pensar en cosas positivas que hayan ocurrido durante el día antes de acostarnos
- Ser amables y aprovechar el tiempo libre con actividades placenteras.
Cuando una persona alcanza una actitud positiva, genera a su alrededor un pensamiento positivo que atrae la simpatía y apego de otras personas , aumenta su autoestima e incluso mejora su salud física.
Para favorecer la felicidad encontramos la práctica de ejercicio, llevar una alimentación equilibrada, practicar nuestras fortalezas (el coraje, la humanidad, la justicia, etc.); mejorar las relaciones sociales (intercambiar experiencias y cuidar a los demás); mantener un pensamiento positivo (hablar de las cosas positivas, por ejemplo); establecer metas vitales que sean accesibles, coherentes con nuestros valores y conectadas entre sí, y trabajar nuestro nivel de resiliencia ante los cambios, para así afrontar las situaciones cotidianas con una mejor disponibilidad a extraer algo positivo.
Fuente: El Periodic.com
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